El Ruido, un inquilino no deseado.

Son muchas las personas que pasan por nuestra oficina de ventas interesándose por nuestras promociones y una de las preguntas que no suele faltar es la relativa al aislamiento acústico de la vivienda. Los comentarios son siempre los mismos, están cansados de escuchar en sus casas las conversaciones de sus vecinos, o lo que es peor, de ser conscientes de que sus vecinos escuchan las suyas propias, o cómo aquellas personas con un sueño “ligero” se despiertan al oír al vecino de arriba ir al baño… ¿Quién no lo ha vivido?

El confort de una vivienda es la suma muchos factores y no cabe duda de que uno fundamental es lo aislado acústicamente que uno esté, tanto del exterior como del interior, con el resto de vecinos y zonas comunes.

Las exigencias técnicas en materia de aislamiento térmico y acústico así como la innovación de materiales, están permitiendo que la construcción de edificios esté dando un salto cualitativo en muchos aspectos. Cuando me siento con alguien para mostrarle nuestras promociones siempre les comento lo mismo, poco tiene que ver la construcción actual con respecto a edificios de hace tan sólo unos años; fachadas ventiladas, calderas altamente eficientes con bomba de calor y aerotermia, vidrios bajo emisivos, ventilación de las viviendas con un sistema de doble flujo y recuperación de calor, laminas anti impacto, etc., etc., etc. Muchas cosas que no se aprecian a simple vista pero que están ahí y sin duda son garantía de confort, dándole un valor añadido a nuestra propiedad.

Hoy os quiero explicar cómo se han proyectado los cerramientos, tanto con el exterior como con el interior, para permitir un alto grado de aislamiento acústico y térmico.

Empezando por el aislamiento con el exterior, la fachada es ventilada con un sistema de colocación cuya principal propiedad es el aislamiento térmico y acústico por el exterior. Este es un sistema constructivo que se ha ido consolidando en los últimos años, con gran aceptación entre arquitectos y constructores por sus excelentes resultados.

Continuando por el aislamiento entre viviendas, es decir, entre vecinos, la tabiquería consta de una doble fábrica de ladrillo cerámico, compuesta por un ladrillo de gran formato con hueco doble y otro con hueco triple. Entre ambas fábricas de ladrillo, y aquí es donde se marca realmente la diferencia, se incorpora lana de roca con una densidad de 40 kilos por metro cúbico entre ellas. Con las zonas comunes, el aislamiento se consigue mediante un ladrillo megatosco, lana de roca y un ladrillo de gran formato hueco doble.

Ya hemos logrado aislarnos de los vecinos colindantes, ¿y con los vecinos de arriba y de abajo? Para salvar los posibles ruidos entre plantas hemos incorporado una lámina tipo Impactodam en los forjados del edificio, cuya misión es minimizar el ruido de los desagradables impactos, es decir, arrastre de muebles y caídas de objetos de todo tipo. Además, en los pilares se incorporará un material, Fompex, que minimiza la transmisión de ruidos a través de la estructura del edificio.

En el próximo post os hablaremos de las cocinas de Víncula Residencial… ¡Estad atentos!